
Ultrasonido terapéutico para disfonía por nódulos vocales
La disfonía por nódulos vocales es una de las patologías más frecuentes entre cantantes, locutores, docentes, actores y oradores. Estos pequeños engrosamientos benignos en las cuerdas vocales generan fatiga, ronquera, pérdida de rango y disminución de la calidad vocal.
Tradicionalmente, el tratamiento combina terapia foniátrica, higiene vocal y, en casos avanzados, cirugía. Sin embargo, en los últimos años se ha incorporado el ultrasonido terapéutico como una herramienta coadyuvante, segura y no invasiva, que acelera la recuperación, mejora la vibración cordal y reduce la inflamación.

¿Qué es el ultrasonido terapéutico?
El ultrasonido terapéutico utiliza ondas acústicas de alta frecuencia para producir un efecto mecánico y térmico controlado sobre los tejidos.
Aplicado en la región laríngea, logra:
Disminuir la rigidez de la mucosa cordal.
Favorecer la microcirculación, reduciendo edema e inflamación.
Mejorar la elasticidad de las cuerdas vocales.
Optimizar la vibración durante la fonación.
🔹 No reemplaza la terapia foniátrica; la complementa y potencia sus resultados.

Indicaciones clínicas principales
El ultrasonido terapéutico está indicado en casos de:
Disfonía por nódulos vocales (incipientes o recurrentes).
Inflamación cordal por sobreuso de la voz.
Edema persistente posterior a sobrecarga vocal.
Prevención de recaídas en profesionales con alta demanda vocal.
Parámetros clínicos recomendados
Parámetro | Rango sugerido | Observaciones clínicas |
---|---|---|
Frecuencia | 3 MHz | Ideal para tejido superficial laríngeo |
Intensidad | 0.5 – 1.0 W/cm² | Usar modo pulsado para evitar calor excesivo |
Modo | Pulsado (20–50%) | Mejora seguridad y tolerancia |
Tiempo por lado | 5 – 8 minutos | Aplicar en ambos pliegues, sin presión directa |
Número de sesiones | 6 – 12 según evolución | Siempre asociado a reeducación vocal |
⚠️ Debe aplicarse únicamente por profesionales capacitados en foniatría o rehabilitación de la voz.
Evidencia científica y experiencia clínica
Diversos estudios han demostrado:
Mejoría en parámetros acústicos: disminución de jitter, shimmer y NHR.
Aumento del tiempo máximo de fonación en un 10–20%.
Reducción de la fatiga vocal tras 4–6 semanas.
Disminución del puntaje VHI-10, reflejando una mejor calidad de vida.
En la experiencia de CLOFOVOZ, el uso coadyuvante del ultrasonido permite una recuperación más rápida y una mayor adherencia al tratamiento foniátrico.

Protocolo general de aplicación
Valoración inicial: evaluación clínica, acústica y videolaringoscópica.
Plan personalizado: definición de sesiones y parámetros según el caso.
Aplicación supervisada: ultrasonido lateral laríngeo con control continuo.
Terapia vocal guiada: ejercicios de resonancia y semioclusivos posteriores.
Seguimiento: ajustes basados en evolución objetiva y subjetiva.
Beneficios para el profesional de la voz
Recuperación más rápida tras esfuerzos vocales.
Menor riesgo de progresión a nódulos fibrosos quirúrgicos.
Incremento de la confianza al percibir mejoras audibles.
Retorno más seguro y precoz a la actividad profesional.

Caso breve ilustrativo
Paciente: Soprano lírica de 30 años con disfonía persistente.
Diagnóstico inicial: Nódulos bilaterales pequeños y fatiga tras 40 minutos de canto.
Protocolo aplicado:
Ultrasonido terapéutico (3 MHz, 0.7 W/cm², pulsado 20%, 6 min por lado) + terapia foniátrica (semioclusivos y resonancia).
Resultados a 5 semanas:
VHI-10: de 27 a 10 puntos.
Tiempo máximo de fonación: +15%.
Recuperación del rango agudo sin fatiga.
Preguntas frecuentes (FAQ)
¿El ultrasonido reemplaza la terapia foniátrica?
No. Es un complemento que acelera y mejora los resultados del tratamiento.
¿Cuántas sesiones son necesarias?
Generalmente entre 6 y 12, dependiendo de la evolución y respuesta del paciente.
¿Es doloroso?
No. Es una técnica indolora y bien tolerada.
¿Se aplica en todos los pacientes?
Debe ser indicado y controlado por un especialista; no se recomienda su uso empírico.
Conclusión
El ultrasonido terapéutico es una herramienta moderna y eficaz en el manejo de la disfonía por nódulos vocales.
Combinado con la terapia foniátrica, ofrece resultados superiores en tiempo, calidad de recuperación y prevención de recaídas.
Para los profesionales de la voz, representa la posibilidad de recuperar la plenitud vocal y volver con seguridad al escenario o al aula.